Tierra

Nuestros viñedos presentan horizontes abiertos, suavemente ondulados, en los que hay que destacar la singularidad de su blanca tierra: la “albariza”, cuya marga blanca y orgánica está formada por la sedimentación de las aguas del mar interior, que cubría la comarca en el periodo Oligoceno. Es rica en carbonato cálcico, arcilla y sílice y tiene un alto poder retentivo de la humedad, almacenando la lluvia caída en invierno para nutrir las cepas en los meses secos de verano.

Nuestros viñedos presentan horizontes abiertos, suavemente ondulados, en los que hay que destacar la singularidad de su blanca tierra: la “albariza”, cuya marga blanca y orgánica formada por la sedimentación de las aguas del mar interior, que cubría la comarca en el periodo Oligoceno. Es rica en carbonato cálcico, arcilla y sílice y tiene un alto poder retentivo de la humedad, almacenando la lluvia caída en invierno para nutrir las cepas en los meses secos de verano.